No es de extrañar que la Biblia esté llena de sabiduría sobre cómo vivir la vida de una manera positiva y significativa. Uno de los temas más generalizados a lo largo de las Escrituras es la importancia de evitar quejarse y murmurar. Esto se debe a que quejarse y murmurar puede convertirse en un hábito que puede tener un impacto negativo significativo en nuestras vidas. De hecho, la Biblia tiene mucho que decir acerca de quejarse y murmurar y por qué es importante evitarlo.
En el libro de los Números, se dice que los israelitas han murmurado contra Dios y Moisés. En respuesta, Dios envió una plaga para castigarlos por sus quejas. Este es uno de los ejemplos más claros de por qué es importante permanecer agradecido y evitar quejarse. El libro de Filipenses también habla de la importancia de evitar quejarse y murmurar. En Filipenses 2:14-16, Pablo escribe: “Haced todas las cosas sin murmurar ni disputar, para que seáis irreprensibles e inocentes, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación torcida y retorcida, en medio de la cual brilláis como luces en el mundo”.
En este pasaje, Pablo está enfatizando la importancia de evitar las quejas y disputas. Él está diciendo que aquellos que son irreprensibles e inocentes, que no se quejan o disputan, serán una luz para los que los rodean. Está claro que la Biblia tiene un punto de vista muy desfavorable de quejarse y murmurar.
El libro de Santiago también habla de la naturaleza de quejarse y murmurar. En Santiago 5:9-10, dice: “No murmuréis unos contra otros, hermanos, para que no seáis juzgados; he aquí, el Juez está a la puerta. Como ejemplo de sufrimiento y paciencia, hermanos, tomad a los profetas que hablaron en el nombre del Señor.
En este pasaje, Santiago está advirtiendo a sus lectores que eviten quejarse unos contra otros, y que tomen a los profetas como un ejemplo de sufrimiento y paciencia. Él les está advirtiendo que Dios juzgará a los que murmuran unos contra otros, y que tomen a los profetas como un ejemplo de paciencia ante el sufrimiento.
Finalmente, el libro de 1 Corintios habla sobre los peligros de quejarse y murmurar. En 1 Corintios 10: 10-11, dice: «No murmuréis, como algunos de ellos, y fuisteis destruidos por el Destructor. Ahora bien, estas cosas les sucedieron como ejemplo, pero fueron escritas para nuestra instrucción, sobre las cuales ha llegado el fin de los siglos «.
En este pasaje, Pablo está advirtiendo a sus lectores que no se quejen, como lo hicieron los israelitas, y fueron destruidos por el Destructor. Él está diciendo que esto debería ser una advertencia para nosotros, para que podamos aprender de ello y evitar tal comportamiento.
En conclusión, la Biblia tiene mucho que decir sobre los peligros de quejarse y murmurar. Está claro que tal comportamiento puede tener graves consecuencias, y es importante permanecer agradecido y evitar tal comportamiento para permanecer intachable e inocente a los ojos de Dios. También es importante tomar a los profetas como un ejemplo de paciencia y sufrimiento, para que podamos aprender de su ejemplo y no murmurar o discutir con otros.